El legajo recoge dos artículos periodísticos relacionados con la detención de Roberto Bertón a raíz de un asalto. A partir de su captura, se conoce la información de que había pertenecido a un grupo guerrillero de la provincia de Salta.
La secretaría de Guerra 2da. subjefatura ejecutiva envía a la Jefatura de Inteligencia de Policía los antecedentes del ciudadano Carlos Heriberto Pereyra pidiendo se identifique donde vive.
El procedimiento administrativo se desencadena con un informe del jefe de la delegación San Nicolás a SIPBA a raíz de una explosión que dejó heridos como saldo, desecha motivaciones políticas del hecho e investiga a los causantes, ambos menores de edad, a quienes describe psicológicamente como involucrados en juegos que proporcionan emociones intensas. El legajo recoge además testimonios de los imputados y actuaciones judiciales.
El legajo se inicia con un informe recibido por SIPBA de parte de la sección cuarta de Morón, Hurlingham, donde se produjo la detención de Roberto Antonio Barua por "hurto reiterado de automotores". Luego de allanar su domicilio, detectan "material ideológico comunista y peronista", por lo tanto proceden a averiguar sus antecedentes. Finalmente, el legajo recoge noticias en medios del arresto y los perfiles de personas cercanas a su círculo, algunos de los cuales resultaron ser sus compañeros de militancia en la Juventud Peronista y otros, además, sus cómplices.
El legajo se abre con la declaración de un funcionario judicial que denuncia haber sido secuestrado. A partir de las descripciones realizadas por Fernandez Lecce la División Investigaciones remite los identikits de los secuestradores reproducidos mediante fotografías.
El legajo se inicia con una sucesión de notas periodísticas en torno de la desaparición de Néstor Martins, abogado, y de Conrado Centeno Delgadillo, por quienes comienzan a organizarse una serie de actos e intervenciones públicas en reclamo. Descontando algunos pocos memorandum, entre los cuales se cuenta una averiguación de antecedentes, intercambiados por dependencias de la Policía, el legajo sigue las repercusiones mediáticas de los actos conmemorativos por la desaparición de ambos.
El legajo inicia con un memorando de la delegación Bahía Blanca a la Dirección SIPBA con la noticia de la denuncia espontánea de Omar Enrique Marre, habitante de Punta Alta, quien informa estar recibiendo desde el Uruguay la publicación "Pekín Informa". Las fotos que componen el legajo son reproducciones de las portadas de distintos ejemplares.
El legajo se abre con un pedido de antecedentes de la delegación San Martín a la Dirección sobre Pablo Suárez Ávila por estar suscripto a la revista "Cristianismo y revolución", caracterizada de subversiva.