El legajo se inicia con un parte que transcribe disposición del Ministro del Interior La División Coordinación Policial en la que se remite nómina de jefes y oficiales del ejército impedidos de salir del país.
El legajo Nº 246 de la Mesa A es sobre la Unión de Estudiantes Secundarios. El legajo registra actividades de la UES en distintas escuelas de la ciudad de La Plata desde 1984 hasta 1991. Está compuesto de informes de inteligencia sobre centros de estudiantes, asambleas, movilizaciones, “actividad panfletaria” entre ortos; recortes periodísticos y documentación producida por las organizaciones.
El legajo se inicia con una sucesión de notas periodísticas en torno de la desaparición de Néstor Martins, abogado, y de Conrado Centeno Delgadillo, por quienes comienzan a organizarse una serie de actos e intervenciones públicas en reclamo. Descontando algunos pocos memorandum, entre los cuales se cuenta una averiguación de antecedentes, intercambiados por dependencias de la Policía, el legajo sigue las repercusiones mediáticas de los actos conmemorativos por la desaparición de ambos.
Informe sobre marcha aniversario de la Guerra de Malvinas en La Plata y charla debate sobre el conflicto entre Federico Storani (UCR) y José Bordón (PJ)
A pedido de la División de Órden Público, Inspección Zonal La Plata realiza el allanamiento de la casa de un miembro de la Fuerza Policial. En dicho procedimiento se secuestra material de propaganda comunista. El legajo contiene además la investigación y búsqueda de antecedentes de Italo Macri y Alba Nicolasa Lahos Moneva de Macri, también integrante de la Fuerza.
El 22 de septiembre de 1972 la Sección Búsqueda de la DIPPBA envía a la Central de inteligencia un informe titulado "Misa organizada por la Juventud Peronista". Allí se señala que un grupo de 100 jóvenes se manifestaron con cánticos, arrojando panfletos y haciendo explotar petardos.
El legajo se abre con la declaración de un funcionario judicial que denuncia haber sido secuestrado. A partir de las descripciones realizadas por Fernandez Lecce la División Investigaciones remite los identikits de los secuestradores reproducidos mediante fotografías.
Denuncia el administrador del Hospital de Romero que cuatro personas fueron a su domicilio amenazándolo con armas de fuego, llevándose distintos objetos (entre ellos su auto) y realizando pintadas de las Fuerzas Argentinas de Liberación (FAL). El administrador es llevado como rehén y luego abandonado en la camioneta con la que los y las integrantes de la FAL habían llegado a su domicilio. El episodio se enmarca en un conflicto Gremial y de salud pública.